Pages

jueves, 27 de junio de 2013

El Amor Du Du

Candela estaba loca

Cuando conoció a Sótelo,  supo que era el hombre que ella había estado esperando, no era su físico, tampoco su acento. Era la magia de ser parte de alguien. 

Siempre supo que él no la amaba, pero no se resignaba a que su gran amor se alejara. Ahora le pesa tanto el no haberse resignado, que quisiera correr, meterse en las olas y nadar a otra orilla, a otros brazos.

Quisiera sentir, como le besan las mejillas, ojos que la miren con ternura, manos que la toquen con deseo, abrazos que la abriguen, labios que la besen, pero sobre todo, palabras que la enamoren.

Candela estaba loca.
Quería casarse de blanco, con el hombre que no la amaba, Para sentir que algo había válido la pena. Que aunque sea en el recuerdo de los dos, viviría la historia que se vivió.

Candela estaba loca.
Quería tener hijos, con el hombre que no la amaba. Para recordar en los ojos de estos niños. El rostro del hombre que nunca fue suyo.

Candela estaba loca.
Quería enseñarle al hombre que nunca la amó. A amarla. Quería decirle que el amor no tiene reparos.Sobre pasa la lógica y lo que se cree normal.

El amor es sólo para locos.

Candela estaba loca, y no se podía esperar que amara con cordura, sino con locura, de la única forma que ella sabía hacerlo.

No hay comentarios: